+ No llegaron boletas de la municipal de Veracruz.
+ El “independiente gandalla de Coatepec”.
+ El próspero negocio de ser líder sindical.
Mathilda y su frijolito mágico (chiste local)
–Chopenjawer
Un muy completo reportaje publicado este martes en diversos portales informativos nacionales e internacionales, revela que el candidato a la alcaldía de Xalapa, David Velasco Chedraui, y dos presuntos prestanombres del ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, son accionistas de la Torre Centro Mayor. (Dicho trabajo se puede leer en https://www.sandiegored.com/es/noticias/206006/Presuntos-prestanombres-de-Duarte-son-socios-de-candidato-a-la-alcaldia-de-Xalapa)
Mejor conocido como Torre JV, se trata del edificio ubicado en la capital de Veracruz que está justo detrás del Hospital Ángeles; de 135 metros de altura, 30 niveles y un helipuerto.
Lo anterior no tendría mayor relevancia y no sería nada malo, pues aparentemente no hay nada ilegal. No obstante, era algo que no se conocía, no era público y se escondía; curiosamente, el candidato David Velasco Chedraui nunca lo ha mencionado, y este lunes por la tarde se “amarró el dedo” diciendo que habría una campaña negra en su contra al revelarse sus nexos con la Torre JV.
La verdad es que no hay nada “negro” (¿a poco para David lo negro es malo? ¿no es racista eso?): simplemente se expuso algo que pocos conocían y parecía que preferían permaneciera oculto de la opinión pública.
Lo que sí es que los personajes a los que se le liga a Velasco Chedraui están ligados a inmuebles adquiridos por el exgobernador Duarte –hoy preso en el Reclusorio Norte– y a investigaciones de la entonces Procuraduría General de la República (PGR)
“Esos socios de Velasco Chedraui se llaman David Alejandro Osorio Aguirre y María Elena Barquín del Puerto, un matrimonio que es investigado desde 2016 por la entonces Procuraduría General de la República (PGR). El matrimonio Osorio-Barquín adquirió en 2014 acciones de la Torre Centro Mayor a través de la empresa Azura Sociedades Unidas SA de CV, ahora El Sabal Investments SA de CV, en la que ambos son socios” detalla el reportaje.
“Con Azura Sociedades Unidas, el matrimonio Osorio-Barquín controla el 18% de las acciones de la Torre Centro Mayor, según datos del Registro Público de Comercio, lo cual les convierte en socios mayoritarios, junto con Raúl González Sánchez, quien tiene el mismo porcentaje de acciones”.
Según documentos públicos consultados en el reportaje, Osorio Aguirre le vendió un departamento en Boca del Río a Mónica Ghihán Macías Tubilla, cuñada del ex gobernador y presunta prestanombres. Ese departamento fue una de 41 propiedades confiscadas por las autoridades judiciales. Por su parte, María Elena Barquín del Puerto también ha sido señalada en medios de comunicación por su cercanía con Duarte de Ochoa: ella y sus hermanos Ignacio, Fernando y Miguel fueron señalados por la PGR como enlace para la compra del rancho Las Mesas en el Estado de México, otra propiedad de Duarte confiscada en 2016.
LA TORRE
La construcción de la Torre Centro Mayor se remonta a 2013, año en el que los constructores Fernando Padilla Farfán y Julián Ventosa Aguilera fundaron “Empresarios Emprendedores de Xalapa”. El primero, según la información publicada, “es compadre de Velasco Chedraui, según una nota de sociales publicada por El Dictamen. Además, fue un proveedor favorecido en la administración estatal de Fidel Herrera Beltrán. El segundo es dueño de la constructora Grupo JV, asentada en Puebla”.
“A través de Empresarios Emprendedores de Xalapa, Padilla y Ventosa adquirieron en 2014 un predio con extensión de 6 mil 684 metros cuadrados y un valor de 10 millones 188 mil pesos, donde iniciaron la construcción de la Torre Centro Mayor. Velasco Chedraui, entonces diputado local del Distrito XII por el PRI, obtuvo el 8% de las acciones de esa sociedad”, detalla.
“Empresarios Emprendedores de Xalapa se convirtió pronto en un objeto de interés para la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, pues en 2017 la investigó por ‘presunción de inexistencia de operaciones’, aunque la situación se descartó dos años después”.
A lo mejor lo que no querían es que a David lo vincularan con tales personajes, pero tarde o temprano esto se iba a saber.
Parafraseando un viejo dicho: nadie puede ocultar lo enamorado, lo millonario o lo… tontín.
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Resulta que ya entregaron boletas electorales a los presidentes de casilla en el puerto de Veracruz, pero solamente les llegaron las de diputados federales y locales. Las que están pendientes son las de las elecciones municipales que, como se recordará, deberían haber sido modificadas porque le quitaron la candidatura a “Miguel Chiquito” y subieron a su esposa (el tema permanece en suspenso porque también está impugnada la candidatura de ella). Según lo que se sabe, las boletas ya tenían impresas el nombre del candidato “tumbao”, por lo que los funcionarios de casilla y capacitadores están con la duda de qué va a ocurrir ahora, pues es un asunto inédito que no había pasado antes.
OTRA NOTA: En Coatepec hay un candidato a la Presidencia Municipal que se dice “independiente” llamado Javier Verónica (aunque todo mundo lo identifica con las siglas del PAN y PRD); este personaje, comentan, usa de manera alevosa a dos personajes muy apreciados en el pueblo mágico: el doctor Gerardo Pozos Camacho y la maestra Irma Lomelí Torres; el primero, va como suplente del aspirante a la alcaldía, y la segunda es candidata propietaria a la sindicatura. Mañosamente, estos dos queridos personajes coatepecanos son el rostro amable de la planilla a sabiendas de que Javier no ganará y acaso alcanzará una regiduría, posición que le dio a Carlos Alberto Ruiz Estrada, un empresario constructor… Dicen que si realmente el “independiente” quería realmente ayudar al doctor o a la maestra, en lugar de utilizarlos de bandera, mejor les hubiera dado esa posición por el bien de Coatepec, no que todo apunta a que colocó un alfil para hacer business con obras.
LA ÚLTIMA PORQUE GIRA PRESIDENCIAL: No es un secreto que ser líder sindical resulta todo un negocio, de ahí que se tengan dirigentes que buscan a toda costa perpetuarse en el cargo, lo que ocurre en sindicatos magisteriales locales, estatales y nacionales. Según la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), hay 93 organizaciones reconocidas en el estado y cada miembro aporta una cuota sindical, aparte de que el Gobierno les otorga un presupuesto que no siempre se utiliza en beneficio de los agremiados. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) fue la cuna de gran número de maestros que hoy están agrupados en otros sindicatos, en su mayoría, pequeños, sin el número de agremiados y fuerza suficiente, y por eso los dirigentes hacen hasta lo imposible por sumar adheridos. De esta manera se encuentra a varios organismos sindicales, como el Sindicato de Trabajadores de Telebachillerato del Estado de Veracruz (SATEBAEV), Alternativa Sindical de Trabajadores de la Educación (ASTEV), Gremio Nacional de Trabajadores de la Educación (GNTE), Liga Magisterial Veracruzana (LMV), Sindicato Independiente de Regeneración Magisterial (SIRMA), que entre todos apenas suman 600 representados… Este tipo de sindicatos significa una carga para el Gobierno, así como lo son los partidos políticos pequeños, que tratan a toda costa de mantener su registro en cada elección… por puro negocio.