Así ni quién lo dude. Cuando alguien piensa así de sí mismo lo más seguro es que lo sea y lo sienta. Y es que no cabe duda que el senador zacatecano Ricardo Monreal, tiene una habilidad espantosa para colocarse donde él quiere y a la hora que se le antoja.
Para muestra basta un botón. El cargo que ostenta de coordinador de la bancada de MORENA en el Senado no fue gratis, lo tuvo que pelear y ganar a chaleco, precisamente contra uno de los hombres más cercanos y respetados por AMLO como lo es Martí Batres, hoy una especie de guardaespaldas de la presidencial Claudia Sheinbaum.
En Zacatecas impuso a su hermano como candidato y lo hizo gobernador con los amarres pluripartidistas que ha cultivado a lo largo de su también plural carrera política.
Ricardo Monreal ha tejido su estrategia para hacerse de la candidatura de MORENA en los estados, donde la fuerza guinda cada día crece. La misma estrategia que con Peña Nieto tejió Miguel Ángel Osorio Chong, pero que al final no le funcionó, pero que en MORENA podría cuajar dadas las características y genes de tribus que se han consolidado en el partido en el poder.
El tema es que se ve muy claro que Ricardo Monreal baila y hace bailar a su ritmo a los demás presidenciables. Cuando dijo que no eran los tiempos, todos callaron, pero ahora que se abrió de capa y se autonombra como el mejor y el más apto para consolidar la 4T, lo más seguro es que los demás continúen en silencio. “Estoy preparado y soy el mejor para continuar con la 4T”, habría declarado Ricardo Monreal en un autodestape.
Quién de los demás se puede abiertamente autocalificar a sí mismos de ser los más preparados y los mejores, como lo ha hecho Ricardo Monreal, cuando saben que dependen de que AMLO quiera o no hacerlos candidatos a la Presidencia.
Pero, ¡Ojo! AMLO no podrá decidir esta vez a la ligera, pues sabe muy bien que Ricardo Monreal peleará a muerte la candidatura de MORENA pero también sabe que perdiéndola se convertirá –como muchos lo han señalado ya- en un plato apetecible de la oposición para arrancarle el poder a MORENA.
Así que estamos ante dos estrategias distintas: la de los disciplinados y la de Ricardo Monreal, a ver al fin y al cabo cuál de las dos logra imponerse y si MORENA sin Ricardo Monreal logra conservar el poder o la oposición con MONREAL logra colarse de nuevo al poder.
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