Cada día se le acerca más la lumbre al dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, ‘Alito’, quien se ha vuelto famoso por su florido lenguaje arrabalero y los sospechosos audios que le han hecho públicos en las que se le vincula con actos de corrupción cuando fue gobernador de Campeche; pero, sobre todo, por el hoyo en el que trae sumido al partido en materia electoral.
Algunos no le perdonan que se haya apropiado de las candidaturas plurinominales en el 21 para colocar a familiares, amigas e incondicionales de la política.
A nivel nacional, el fuego fuerte en contra de ‘Alito’ lo inició el grupo de expresidentes del CEN del PRI encabezados por el senador Miguel Ángel Osorio Chong. Este grupo se puede observar que va con todo y ya le pisa los talones por cualquier rendija estatutaria.
Y es que ‘Alito’ ya se ha convertido para el PRI en una vergüenza nacional, no solo para el priismo sino también para el panismo con quienes planean hacer una alianza electoral para el 24.
Además, en la Cámara de Diputados han salido también voces de compañeros priistas que exigen le sea retirada la presidencia de la Comisión de Gobernación y Población al diputado Alejandro Moreno la presidencia de la Comisión de Gobernación.
Pero no solo en la CDMX le llueve a Don Alejandro Moreno, también en varios estados del país le llueve bonito y tupido.
Por ejemplo, en Veracruz, la Corriente Critica Democrática Independiente que coordina Ismael García Huesca, ha manifestado su respaldo al Frente Nacional Democracia y Justicia Social Plataforma Refundacional del PRI, en un boletín de prensa que dice:
“Veracruz, conscientes de la difícil situación que enfrenta el PRI ante el electorado nacional, les manifestamos nuestro total respaldo y suscribimos las propuestas que plantearon con el objetivo de mantener la unidad partidista y fortalecer al Instituto Político. Por lo anterior, reflexionamos que es urgente proceder a la inmediata renovación de la Dirigencia Nacional, a la revisión de la integración de los Consejos Políticos Nacional y Estatales, y a convocar a una Asamblea Nacional Extraordinaria para actualizar estructuras, para renovar estrategias, y para elaborar un Proyecto de Nación congruente y lógico, con los valores y principios de nuestro Partido, que cuente con los intereses de las y los mexicanos para de esta manera, fortalecernos rumbo a 2024 y ser una autentica y verdadera opción para el electorado”.
La pregunta es cuánto tiempo aguantará ‘Alito’ en el poder, o mejor dicho, cuánto tiempo aguantarán los priistas a un dirigente nacional al que la justicia le pisa los talones por la presunta corrupción electoral y la cometida en su anterior cargo como gobernador de Campeche.
Extraña y mucho que los priistas aún sigan reflexionando y solapando las actitudes altaneras de ‘Alito’ y sigan buscando salidas estatutarias cuando no las hay y no recurran a la Comisión de Justicia Partidaria para expulsarlo de la presidencia antes de que como algunos señalan ya, desaparezca al PRI.
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