Gran frase del Grande de la Canción Mexicana, José Rómulo Sosa Ortíz, mejor conocido como José José en su famosísima interpretación, El amor acaba y es que la estrofa de esa melodía encierra una gran verdad, hasta la belleza cansa.
Y esto viene a posta, porque en las sociedades del mundo, muchas cosas han cambiado en los últimos años, hoy en día hasta la belleza cansa, si esta no está sustentada con realidades, hoy en día, casi nadie está dispuesto a vivir solo de promesas e ilusiones, también es cierto que hoy en día, lo que hace 20 años estaba bien, actualmente es inaceptable.
Por esto es muy importante, que todos los medios de comunicación demos a conocer de manera objetiva, oportuna y veraz, todo lo referente al caso Araly Rodríguez Vez, ya que según el propio gobernador García Jiménez nosotros somos los responsables de la confusión, ya que recriminó en su rueda de prensa de ayer, que nosotros los comunicadores, no habríamos dado a conocer el desenlace del Araly’s Affaire.
Y es que en realidad muchos de nosotros, no tomamos muy en serio la carta publicada en redes sociales, en donde la empresaria informara, que en el domicilio fiscal se encuentra asentado un consocio empresarial y además, dice que ella habría obtenido el registro en el padrón de proveedores de la Secretaría de Finanzas y Planeación, de manera legal y cumpliendo con todos los requisitos correspondientes, aquí me hubiera gustado que saliera el director de administración de la SEFIPLAN, que es de quien depende el padrón de proveedores, para ratificar los dichos de la empresaria.
La empresaria Rodríguez Vez, en su carta señala que su domicilio fiscal es en la calle Huelva numero 12 y que efectivamente, hay una tienda de abarrotes a escasos metros del inmueble, que es el inmueble que ha aparecido fotografiado en algunos medios de comunicación, pero que de ningún modo sus empresas, despachan en la tienda de abarrotes.
La popular empresaria, concluye su misiva señalando, que en las secretarías en donde ha tenido algún contrato, jamás ha incurrido en ninguna irregularidad y ha cumplido estrictamente, con la entrega de los bienes y servicios que le han sido solicitados, de manera oportuna y con la calidad requerida.
¡Pues mi gente! Les diré que aquí me resulta medio intenso, que el gobernador García Jiménez, haya tenido que salir a decirnos que la carta, era efectivamente una misiva original y que la señora Rodríguez Vez, siendo apoderada legal del consorcio empresarial, no haya sabido comunicarse de manera efectiva con la sociedad y los grupos empresariales, que finalmente son quienes una vez que esto acabe, juzgarán todo esto.
Creo que luego de la borrachera gubernamental con Javier Duarte de Ochoa, la resaca para nosotros los veracruzanos, ha sido la peor, no hubo un solo sector, al que Javier Duarte no le partiera la mandarina en gajos, en un inicio los veracruzanos nos nos dimos cuenta, pero fue al quinto año del periodo duartista, en el que todo se le empezó a caer.
Por supuesto que todos los veracruzanos, deseamos que Cuitláhuac García Jiménez y su grey, no sean iguales, por supuesto que deseamos creer que todo está bien, que la situación de la señora Rodríguez Vez, sea en efecto producto de la mente enferma de los duartistas que armaron toda una estrategia para perjudicar al gobierno estatal, porque definitivamente nadie, quiere volver a vivir lo que se vivió la resaca duartista.
En fin, el tiempo será el que le dará la razón, a quien sea que la tenga, esperemos por el bien de Veracruz, que todo esto del Araly’s Affaire, haya sido Marlon solito, queriendo perjudicar al cuatroteísmo.
Así las cosas mis chulos, nos leemos el próximo lunes, bonito fin de semana.