Luego de que las dos corcholatas Adán Augusto López y Marcelo Ebrard se tiraran la bolita por la responsabilidad de a quién le correspondía el tema de los migrantes quemados en Ciudad Juárez, la 4T aplicó la salomónica decisión de quitarles los reflectores de encima a ambos y entregarle la batuta a la Secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez.
Así, tal como sucedió en el caso del secuestro y asesinato de los jóvenes estadounidenses en Tamaulipas, a Rosa Icela Rodríguez le tocó volverse a poner el uniforme de bombero y apagar el fuego (figurativamente hablando) de los cohetones que se dirigían a la Secretaría de Gobernación y a la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Sin embargo, y pese a que es la Secretaria de Seguridad la que cargará de aquí en adelante con la responsabilidad de informar y por ende también con dejar al país tranquilo o no con las investigaciones del caso, muy pocos están conformes con que no sean Adán Augusto o Marcelo Ebrard los que se presenten al frente de las investigaciones de estas acciones que se circunscriben en el ámbito de sus responsabilidades.
Por lo pronto, Rosa Icela Rodríguez ya informó que se han tramitado cuatro órdenes de aprehensión, una contra una persona migrante señalada de iniciar el fuego, dos contra personal de migración y una contra un guardia privado. Así mismo, reprobó la mala actuación de los servidores públicos e indicó que hasta el momento se tienen identificadas a ocho personas, probablemente responsables de los hechos: dos agentes federales, un elemento del Instituto Nacional de Migración y cinco personas de la empresa privada de vigilancia… esto es, por donde le vean son responsabilidades que caen en las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores.
Dice un sabio dicho que en la Administración Pública se puede delegar el trabajo, pero no la responsabilidad… y por tanto la responsabilidad de lo que sucedió en Juárez es, aunque sea moral, de Adán Augusto López y Marcelo Ebrard.
Ellos, por cierto, este mismo miércoles volvieron a lo que en verdad les interesa, la grilla y placearse en búsqueda de la candidatura.
Marcelo Ebrard presentó por enésima vez su libro y Adán Augusto López visitó por cuarta vez en menos de un mes y medio, a Veracruz.
Cualquiera de las dos actividades pudo ser evitada y ellos pudieron estar presentes en la conferencia de Rosa Icela Rodríguez, pero no, la decisión ya está tomada desde Palacio y es cuidar la imagen de las dos corcholatas a cualquier precio.
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