Hoy me dirijo a ustedes con un profundo sentimiento de rabia y consternación por el abuso que las funerarias cometen ante el dolor ajeno. En momentos de pérdida y duelo, es crucial que las empresas funerarias muestren empatía, respeto y transparencia, pero lamentablemente, esto no siempre es el caso.

Hemos escuchado innumerables historias de familias que, en medio de su aflicción, son víctimas de prácticas poco éticas por parte de ciertas funerarias. Estas acciones incluyen precios inflados, cargos ocultos, presiones indebidas para adquirir servicios innecesarios y falta de transparencia. Esta explotación de la vulnerabilidad de las personas en su momento de necesidad es inaceptable.
En nuestro caso no fue la excepción, mi padre en 1988 adquirió un TÍTULO DE DERECHO USO A PERPETUIDAD Y SUS SERVICIOS FUNERARIOS (donde se incluye terreno, servicio de carroza y servicio de sala de velación)
Posteriormente, el 27 de septiembre del presente año, ante el fallecimiento de mi papá, acudí a la funeraria BOSQUES DEL RECUERDO, y solicité hacer valido el contrato, con la aclaración de que se había tomado la decisión de cremar a mi señor padre, aceptando los cargos por ese servicio que NO se tenía incluido en lo que mi papá en su tiempo había contratado, sin embargo, sorpresivamente, el personal de la funeraria me hizo saber que dicho contrato y sus beneficios, solo aplicaba para el caso de que mi papá fuera sepultado, y que por lo tanto, yo debía cubrir los gastos por el uso de sala de velación y carroza fúnebre, ante dicha situación y la premura, accedí a pagar lo que ellos quisieron.

Invito a las autoridades a tomar medidas para regular esta industria y proteger a las familias en duelo. También invito a todos a investigar las funerarias con cuidado, sobre todo a los que ya tienen contratado de servicio por anticipado para asesorarse legalmente y conocer a que tienen derecho POR CONTRATO. Juntos, podemos poner fin a estos abusos y asegurarnos de que las empresas funerarias cumplan con estándares éticos y humanos en todo momento.

El duelo es un proceso suficientemente difícil, y nadie debería tener que enfrentar prácticas abusivas en un momento tan delicado. Esperamos que esta carta sirva como un llamado a la acción y una expresión de solidaridad con todas las familias afectadas por estos comportamientos inaceptables.

Gracias
Eduardo Blanco G.