Al parecer fue dura la batalla azul interna en el distrito electoral local de Córdoba, pero finalmente la juventud y el género se impuso y será Mariana Ríos la que se registre en el CDE del PAN para competir por la diputación local por la coalición “Fuerza y Corazón por Veracruz”, dado que como se sabe, le corresponde al PAN postular candidato en el distrito 19.
Al PAN, según el acuerdo nacional entre Álito Moreno Cárdenas, Marko Cortés y Jesús Zambrano, dirigentes nacionales del PRI, PAN y PRD, le corresponde postular candidatas azules en los distritos 16 de Boca del Río, 13 de Emiliano Zapata, 28 de Minatitlán, 27 de Acayucan, 9 de Perote y 25 de San Andrés Tuxtla. Además del 19 en Córdoba.
Al excandidato a gobernador, exsecretario de Gobierno con Javier Duarte de Ochoa, Gerardo Buganza Salmerón, los empresarios que lo han seguido e impulsado en sus proyectos políticos, le apostaron e insisten en él para llevarlo y sentarlo en una curul del Palacio del Encanto, pero al parecer ni los 936 mil 470 votos que obtuvo en el 2004 cuando mordió el polvo con Fidel Herrera Beltrán en su intento de ser gobernador, le alcanzarán para ganar esta vez la candidatura a la joven Mariana Ríos.
La militancia azul de Córdoba no olvida la afrenta sufrida al ver a su gallo inclinarse ante sus odiados rivales priistas y menos ante su paisano Javier Duarte de Ochoa y que le sirvió como validador de una campaña de resultados dudosos.
Veracruz reduce los homicidios y cumple objetivo de no rebasar la media nacional de tres al día
La diferencia entre un Estado en el que “no pasa nada” y un Estado en el que “se reducen los homicidios”, es gigantesca. Y, aun así, hay quienes señalan que en Veracruz “no pasa nada”.
Pero ciertamente no es el Gobierno estatal quien señala presume de no pasar nada. En Veracruz se analiza y se da seguimiento a la inseguridad y el gobernador Cuitláhuac García Jiménez es puntual cuando advierte que “Veracruz reduce los homicidios porque atiende las causas”.
Lo cierto es que en Veracruz se tiene un objetivo claro, que prestar la máxima atención al tema para que no se rebase el promedio de tres homicidios diarios, y en la última semana este objetivo se cumplió ya que el registro del 5 al 11 de marzo fue de 16.
Eso sí, si se toma en cuenta el acumulado de todo el sexenio, Veracruz no queda bien parado, pero esto es porque no se toma en cuenta la tendencia, la cual va a la baja comparada con los últimos años de Javier Duarte y el bienio de Yunes Linares.
Los primeros dos años, principalmente, del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, fueron muy complicados en materia de seguridad, pues la inercia delincuencial era galopante y era imposible llegar inmediatamente a los niveles de menos de tres homicidios diarios en promedio.
Hay días malos, como en todos lados, cuando la cifra rebasa el promedio, pero con los demás días se compensa y semana tras semana la disminución de homicidios es real. Y esto no se dice como comentario, estas son cifras, cifras que se tienen que ver como tendencia y no como un acumulado sexenal.
El querer calificar la situación de inseguridad de un Estado tomando en consideración un acumulado sexenal, es una visión amarillista del problema, pero Usted, bien querido lector lectora, seguramente eso ya lo sabe.
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