En la CDMX, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, salió muy temprano a los medios a dar entrevistas con varios destacados comunicadores que cubrían en el Congreso el evento de toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo, primera presidenta de México.
En cada entrevista repitió lo mismo. Se aprendió bien el guion y sabía el propósito y a quién le enviaba el mensaje.
Alito habló de que en el nuevo gobierno hay una oportunidad de oro para el diálogo y consensos a favor del país. El espíritu del PRI, dijo Alito, siempre será firme y crítico, pero constructivo. Y advirtió que si la oposición convoca al diálogo -caray ¿el PRI no es la oposición?– y a la conciliación, y a pensar en el país, “todos debemos tener un comportamiento institucional, republicano y de respeto”.
No pues sí, que Alito le salió lo respetuoso y republicano esta mañana.
Y como dicen que la mejor defensa es el ataque, Alito lanzó el reto: “Es momento de que Claudia Shienbaum logre un acercamiento con la oposición”, y agregó que su partido siempre estará en la mejor disposición de lograr diálogos y acuerdos. Pues cómo no, si hoy tiene la soga puesta en el cuello, desde dentro y fuera de “Su PRI”.
Y como para qué o en qué le beneficiaría a Claudia Sheinbaum y a su gobierno acercarse “al PRI de Alito”, cuando ya otros priistas y mucho más serios que el campechano, caminan hacia una relación institucional con el nuevo gobierno.
La educación y el Sistema Tecnológico de Veracruz, el Gran Escape de la pobreza
Uno de los pocos logros que dejó Javier Duarte de Ochoa fue la ampliación del Sistema Tecnológico en Veracruz. ¿Por qué? Porque pocos saben que, de acuerdo a estudios probados, el 67% de los estudiantes de esos institutos tecnológicos eran la primera persona de sus familias, que estudiaban una educación superior.
¿Se imagina Usted las oportunidades que se le abrieron a miles de jóvenes veracruzanos? Generaciones enteras de veracruzanos que no habían podido pasar de la educación bachiller, y de pronto, gracias a acercarles un Tecnológico a zonas donde la Universidad Veracruzana no llegaba, estos pudieron tener una mejor oportunidad de vida.
Sin embargo, aún había mucho trabajo por hacer en el Sistema Tecnológico para su adecuada consolidación.
Y es que de los 22 institutos y tres universidades de Educación Tecnológica en Veracruz, siete carecían de instalaciones propias; hoy todos tienen obra nueva y por lo menos un edificio, gracias al apoyo y la gestión del actual gobierno. “Queremos recibir y formar más estudiantes”, expresó el gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
Dentro de las últimas inauguraciones está la del Tecnológico de Huatusco (ITSH) en donde el mandatario inauguró un complejo de aulas tipo H, de dos pisos, donde destacó la planeación sexenal para intervenir los 25 planteles además de los 20 mil de nivel básico y medio superior; también reconoció a los directivos, docentes y personal administrativo la gestión de la carrera en Ingeniería Química, abierta en agosto con 52 jóvenes.
En este espacio se ha comentado en múltiples ocasiones, y se ha hecho un símil con la película “El gran escape”, en la cual prisioneros de guerra intentaban huir sin dejar a nadie atrás. Así, la educación también es el gran escape de la pobreza. Sin educación los jóvenes difícilmente pueden escapar de un pasado precario y la educación les da mejores oportunidades. Por eso, el acercar la educación superior a los veracruzanos ha sido y sigue siendo, “El gran escape”.
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