En los cafés se comenta que las cuentas de Twitter del jefe político de Winckler, las de Miguel Chico y de Fernando, están calladitas y con un silencio sepulcral.
Comentan que entre las voces que sí se han dejado sentir en la política local por la detención del exfiscal Jorge Winckler, están haciendo falta las de peso completo y que las de los charales azules son demasiado tibias, como las divulgadas en un boletín de prensa por el CDE del PAN que firman Federico Salomón Molina y algunos diputados locales y federales azules que manejan la desgastada idea de que ‘se trata de un caso más de persecución política’.
Lo más fuerte que expresan ahí tiene que ver con el tema que, por cierto, ya perdió Jorge Winckler Ortiz en tribunales, acerca de su destitución como fiscal, según ellos se hizo de manera ilegal, arbitraria y sin apego a Derecho. Quizá sea por no estar enterados del fallo del Tribunal Federal.
De ahí en fuera nada sustancial. Comparar el caso Winckler con los de Rogelio Franco, Tito Delfín, José Manuel del Río y Bernardo Segura, no es motivo de orgullo ni pareciera beneficiar al exfiscal.
Pero eso dicen los azules que hoy ostentan el poder en el CDE del PAN, que los de la otra ala, la de los contrarios encabezados por el ‘Chapito’ Joaquín Guzmán Avilés, tampoco han dicho esta boca es mía. Vaya ni por solidaridad partidista.
Tampoco se ha escuchado, por cierto, la postura de los partidos aliados PRI y PRD, salvo este último que sí dijo algo pero nadie escuchó.
En cambio el dirigente estatal de Fuerza por México, Eduardo el ‘Tato’ Yunes, ese si habló; aunque no en favor de Winckler, sino todo lo contrario, al sostener que: “Hay quienes merecen ser castigados con mucha fuerza” Y abundó en la obviedad de que “Jorge ‘N’ abusó de su poder porque se sabía protegido por el clan que dominaba Veracruz”.
Pero lo que en verdad extraña es el hecho que los Yunes del Estero, o los del Clan como les llama el ‘Tato’ no le han hecho fuerte a su brazo ejecutor, ni siquiera han lanzado una flor a los pies de Winckler. Las cuentas de Twitter, de Miguel Ángel Yunes Linares, de Miguel y de Fernando, están más calladitas que la estatua de los ‘Voladores de Papantla’ que en breve será derribada por el alcalde de Boca.
¿Algo turbio hay por ahí en esa relación? ¿Algo tiene que ver con ese ‘No me iré solo’ que aseguran dijo Winckler al momento de su detención?
Por lo pronto los lecheros y cigarritos se les envían desde aquí al recién detenido. ¡No hay que ser!
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